Blog Letras y Autores

Un deseo hecho realidad

Por Agustina Todo comenzó una tarde cuando salí a navegar con mi familia. Nos gustaba ver el atardecer cuando

Un deseo hecho realidad

Por Agustina

Todo comenzó una tarde cuando salí a navegar con mi familia. Nos gustaba ver el atardecer cuando el sol desaparecía en el agua, mientras mirábamos los peces para por alrededor nuestro.

Era una tarde diferente, el agua se había puesto cristalina y un calor poco común en mayo invadía este momento del atardecer. Mi familia y yo estábamos muy felices por el hermoso día que nos había tocado, mientras sacábamos fotos de cada momento porque era increíble lo que estábamos viviendo. Un grupo de ballenas de repente aparece en frente nuestro.

_ ¡Que loco! _dice mi papá_ éstas no son aguas donde pueda haber ballenas.

Lo raro de que estén ahí no nos importó ya que se veían felices y podíamos ver como jugaban entre ellas. Yo nada sé de ballenas pero en mi cabeza viéndolas podía imaginar que eran una familia (mi familia) pude imaginar qué el más grande de ellos era mi papá, también así mi mamá y mis hermanos y yo éramos los que jugábamos sin parar.

Mientras la estrella fugaz caía yo solo veía como la ballena más chica era la que me había imaginado qué era yo. En ese momento mi papá decidió anclar y qué nos vayamos a dormir porque era muy tarde para regresar.

Cuando desperté creyendo que era una mañana normal, algo noté qué había cambiado, algo era diferente. Me quise sentar en la cama pero en lugar de mis brazos y piernas, sentí un peso extraño y una forma que no reconocía. Miré hacia abajo y para mi sorpresa, no vi mis manos. En su lugar, había un cuerpo enorme y azul, cubierto de una piel suave y brillante. ¡Me había convertido en una ballena! Intenté llamar a mi mamá porque tenía miedo, pero solo emitía un sonido raro y fuerte. Cuando mami fue a ver que me pasaba nos dimos cuenta que todos nos habíamos convertido en ballenas. Pasamos un día hermoso nadando y jugando en el océano. Fuimos ballenas por un día y nuevamente llegaba el atardecer junto con la estrella fugaz cuando papá decide que deberíamos acostarnos a dormir.

Pixelados | Revista escolar Argentina para adolescentes
Previous Post