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Masterchef químico

Por Catalina – Celeste – Morena La química en la cocina se ha convertido en un aspecto fundamental de

Masterchef químico

Por Catalina – Celeste – Morena

La química en la cocina se ha convertido en un aspecto fundamental de la gastronomía moderna. Con el avance de la ciencia, las cocinas de hoy se asemejan a laboratorios donde se aplican principios científicos para transformar ingredientes y crear nuevas experiencias culinarias, desde la elección de los ingredientes hasta las técnicas utilizadas. La química en los alimentos permite innovar en sabores, texturas y aromas que sorprenden al comensal.

Tradicionalmente no se había prestado demasiada atención a los fundamentos científicos culinarios. Solo recientemente, cuando algunos cocineros como Heston Blumenthal y Ferran Adrià, entre otros, comenzaron a analizar los procesos implicados en las preparaciones culinarias, se ha empezado a ver que existe una relación.

Los químicos que se encuentran en la cocina se centran en el uso de la cocina como una forma de entender conceptos de mezclas y disoluciones. Se mencionan experimentos como la preparación de un bizcocho, que ilustran cambios químicos en los alimentos. Además, se destaca la importancia de lecturas complementarias sobre ciencia alimentaria y la historia culinaria para desarrollar habilidades cognitivas y lingüísticas.

Cocinar a baja temperatura es una técnica que hace que la carne quede súper tierna y jugosa. Además de que los sabores se concentran mucho más al usar menos calor, las vitaminas y nutrientes de la comida se conservan mejor, haciendo que comas más sano. Además, todo se cocina por igual, evitando que queden partes crudas o secas.

Sin embargo, es importante tener cuidado con la seguridad alimentaria, asegurándote de que la carne alcance una temperatura interna segura, aproximadamente 63 °C para la carne roja, para eliminar cualquier bacteria y que te salga bien. Es clave usar siempre un termómetro de cocina para controlar la temperatura. Si cocinas carne, un buen truco es dorarla un poco a fuego alto antes de empezar la cocción a baja temperatura para darle más sabor. Eso sí, tené paciencia porque este método lleva tiempo, a veces varias horas. Así que es bueno planificarlo con antelación.